El Reino Unido desea concluir un nuevo tratado de seguridad con la Unión Europea (UE) después del 'brexit' y no excluye seguir formando parte de Europol (la oficina de policía de la UE), según un documento de trabajo publicado este lunes.

El texto, uno más en la serie de documentos que el Gobierno británico ha publicado este verano donde fija sus posiciones en la negociación con Bruselas, subraya que para Londres es "vital" mantener la cooperación al actual nivel, dada la amenaza terrorista que pesa sobre los países europeos y pocos días después de haber sufrido el quinto atentado en seis meses en su territorio.

Londres ha examinado los acuerdos firmados por la UE con países terceros, como los que permiten compartir las huellas digitales o el intercambio de datos de los pasajeros aéreos, pero considera que estos acuerdos son inferiores al nivel de coooperación de que goza actuamente el Reino Unido, como miembro de la UE.

Las amenazas

"Con las amenazas que evolucionan más rápidamente que nunca, es claramente en interés de todos los ciudadanos que el Reino Unido y la UE mantengan la cooperación más estrecha posible en la lucha contra el terrorismo, el crimen organizado y otras amenazas a la seguridad", señala el documento.

"Desarrollar un nuevo marco para seguir esta cooperación requerirá un nivel de ambición compartida: el Reino Unido y la UE deben ir más allá de los acuerdos existentes con países terceros", añade.

El Ejecutivo que dirige Theresa May considera también posible un acuerdo para mantenerse en Europol y en el sistema de la orden de arresto europea.

En cambio, "el Reino Unido dejará de estar sometido a la jurisdicción directa del Tribunal de Justicia de la UE", una posición que ya había sido expresada por May.