¿Se puede identificar a un terrorista suicida por su aspecto físico? El Gobierno británico considera que sí. Por eso, estudia un nuevo plan de seguridad en los aeropuertos que pretende eliminar los registros indiscriminados a los viajeros y que concentraría la vigilancia antiterrorista en los pasajeros musulmanes.

El plan prevé que solo registre a aquellos cuya presencia física apunte a que puedan ser musulmanes. También deberán registrarse a los que muestren un comportamiento extraño o que hagan rutas inusuales.

Los más afectados por estas medidas serían los pasajeros de origen árabe o asiático. Este método de registro basándose en el aspecto físico se aplicó durante un tiempo tras el atentado del 7-J, el verano pasado, y resultó criticado por asociaciones musulmanas y de derechos civiles.

La Asociación Musulmana del Reino Unido ha calificado este método de "discriminatorio" y ha denunciado que puede tener como resultado la "estigmatización" de una comunidad. Además, un portavoz de esta asociación recordó que ser musulmán no es una cuestión étnica y que "como demostraron las detenciones de la semana pasada hay mucho blancos que se han convertido al Islam".

El antiguo director general de la compañía British Airways, Rod Eddington, criticó los registros indiscriminados y dijo que es "irracional someter a una señora de 75 años al mismo cacheo que a un joven de 25 que acaba de comprar su billete en efectivo".

La medida pretende paliar las enormes colas que se están formando en los controles de seguridad de los aeropuertos y que están causando importantes pérdidas a las compañías y un significativo perjuicio económico al país.

OTRA DETENCION Por otra parte, la policía británica anunció ayer la detención en una localidad en el valle del Támesis de un nuevo individuo por su presunta vinculación con el complot.