El presidente palestino y líder de Al Fatah, Mahmud Abás, ha pedido a sus fuerzas que combatan para impedir la caída de Gaza en manos islamistas, mientras que el movimiento integrista Hamás ha asegurado que sus hombres han tomado el cuartel de la Seguridad Preventiva en la capital de la franja. Abás, presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), quien dirigirá un mensaje a su pueblo desde la ciudad cisjordana de Ramala, ordenó hoy a sus fuerzas de seguridad que combatan a los milicianos de Hamás en Gaza.

Un oficial de los organismos de seguridad confirmó a Efe que la orden fue dada esta mañana, después de que altos mandos le pidieran autorización a Abás para combatir. Abás dirigirá a su pueblo una alocución en la que, según apuntan distintos medios, puede anunciar la salida definitiva de su movimiento, Al Fatah, de la coalición de gobierno con Hamás.

En el plano político Hamás ha pedido a Egipto, que actúa de mediador, que garantice un acuerdo con Al Fatah para "salvaguardar el Gobierno de unidad nacional", que se reclute personal para las fuerzas de seguridad conjuntas y que se entregue a la Justicia a los "criminales de ambos bandos". De confirmarse la caída en manos de Hamás del cuartel de la Seguridad Preventiva en Gaza, como afirmó un portavoz islamista, supondría un serio revés para las milicias nacionalistas.

Según fuentes de Al Fatah, los organismos de seguridad de la ANP tienen aún en su poder el edificio del Mujabarat (policía secreta), el complejo presidencial, el de la Seguridad Preventiva y el complejo Anzar, cuartel general de todas las fuerzas paramilitares. El cuartel general de Anzar acoge a la Seguridad Pública, el mayor cuerpo de la ANP, la Fuerza 17 o guardia presidencial, la Inteligencia Militar y la Marina, entre otros.

Éxodo de Al Fatah

Su rendición a los islamistas supondría de facto la caída de Gaza en manos de Hamás. No obstante, tras los combates librados en los últimos días, los milicianos de Hamás controlan desde anoche la mayor parte de Gaza, y según dijeron a Efe fuentes de Al Fatah, la mayor parte de los líderes y altos oficiales del movimiento nacionalista se han trasladado a la ciudad de Ramala con el presidente Abás.

Fuentes del movimiento indicaron a Efe que muchos de los líderes y altos oficiales han conseguido salir de Gaza en los últimos días gracias a sus estrechas relaciones con los organismos de seguridad y el Ejército israelíes. Los funcionarios cruzaron a Israel a través del paso de Erez y de otras fronteras, y desde allí se trasladaron a Ramala, añadieron las fuentes.

Uno de los pocos que ha quedado en Gaza es Maher Hellez, secretario de Al Fatah en ese territorio, que se encuentra custodiado por fuerzas de la Seguridad Preventiva, indicaron a Efe fuentes del partido. Para evitar un mayor deterioro de la situación, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, consultó el martes al Consejo de Seguridad del organismo la posibilidad de desplegar una fuerza multinacional para detener el conflicto interno palestino.

El jefe negociador palestino, Saeb Erekat, respondió hoy que "todas las opciones están abiertas". En declaraciones a Efe, Erekat, uno de los principales consejeros de Abás, calificó la situación en la franja de Gaza de "nefasta" y advirtió de que, pese a los esfuerzos de los dirigentes de llegar a un acuerdo y reducir la tensión, "la situación no hace más que deteriorarse".

La ministra israelí de Asuntos Exteriores, Tzipi Livni, quien inicia hoy una gira por varios países europeos, abordará con sus homólogos comunitarios "la cuestión del despliegue de una fuerza internacional es sopesado", manifestaron fuentes de su Ministerio. También el jefe de la diplomacia europea, Javier Solana, mencionó ayer que la Unión Europea está dispuesta a considerar formar parte de una fuerza internacional militar al sur de la franja de Gaza si así lo piden israelíes, palestinos y egipcios.