Una marcha de miles de campesinos y sindicalistas afines al Gobierno de Evo Morales tiene previsto llegar mañana a La Paz para exigir al Congreso que convoque el referendo sobre la nueva Constitución de Bolivia que impulsa el oficialismo. Ayer, unas 70.000 manifestantes, se encontraban en las puertas de La Paz con la intención de presionar al Congreso boliviano para que dé luz verde al referendo popular necesario para ratificar la nueva constitución.

El cerco oficialista en torno a La Paz no estuvo ayer exento de situaciones dramáticas. Un dirigente campesino que participaba de la masiva marcha falleció después de ser atropellado por un vehículo, cuyo conductor huyó a toda velocidad.

Mientras, el Movimiento al Socialismo (MAS), el partido de Morales, realizaba gestiones para obtener los 105 votos necesarios para poder convocar la consulta. La prensa boliviana hablaba de modificaciones "no sustanciales" en más de 100 artículos. Dos de las cuestiones en las que no hay acuerdo son el asunto de la tierra y el primer artículo de la Constitución, que define a Bolivia como "Estado social de derecho plurinacional comunitario", con 36 etnias.