Al menos 40 talibanes, entre los que se encuentran personalidades del anterior régimen, protagonizaron ayer una fuga de la prisión central de Kandahar, uno de los antiguos feudos de los integristas afganos.

Los presos lograron evadirse de la cárcel a través de un túnel de 30 metros de longitud el viernes por la noche, según informó ayer el gobernador de la provincia, Yusuf Pashtun. Los detenidos se encontraban recluidos por sus actividades en favor de los talibanes, por participar en acciones de guerra o por pertenencia al movimiento islamista Hezbi-i-Islami. Entre los fugados está Abdul Hadi, hermano del exministro de Defensa talibán, el mulá Obaidulá.

Según el gobernador de Kandahar, "la evasión precisó de un mes de trabajo y de la evacuación de toneladas de tierra por lo que los fugados contaron con la complicidad de alguien en la prisión". Cinco guardianes desaparecieron con los fugados.