Al menos 45 personas murieron hoy y otras 103 resultaron heridas tras la explosión de un camión bomba y un coche bomba en la ciudad iraquí de Tel Afar, en la provincia de Nínive, 470 kilómetros al norte de Bagdad, informaron fuentes policiales.

Las explosiones tuvieron lugar en un breve intervalo de tiempo en los céntricos barrios de El Kefah y Wahda, en esta ciudad de población mixta (turcomana, árabe suní y kurda) y ubicada cerca de la frontera con Siria. El primer atentado tuvo lugar en El Kefah, cuando explotó un camión cargado con sacos de harina, tras los que estalló un coche bomba estacionado en un concesionario de automóviles en Wahda.

Testigos oculares dijeron a Efe que los rebeldes se aprovecharon de la entrada de una caravana de camiones cargados con artículos alimentarios de primera necesidad para lanzar el camión contra la multitud en un aparcamiento descubierto. Según fuentes hospitalarias, las centros médicos de la zona sufren escasez de medicinas y de material, por lo que esperan que la cifra de víctimas continúe aumentando según pasen las horas.

Viviendas destrozadas

Aquil Zein El Abedin, un testigo ocular de uno de los atentados, dijo a Efe que "varias viviendas alrededor del aparcamiento se desplomaron por la explosión, con todos sus habitantes dentro". Unas 50 viviendas quedaron destrozadas por las explosiones, que además incendiaron decenas de coches. Los equipos de socorro acudieron a las dos zonas para el traslado de los muertos y heridos.

Sin embargo, Hicham el Hamdani, jefe de la comisión de seguridad de la provincia de Ninive, declaró a Efe que un grupo armado de desconocidos interceptó el paso de los equipos de socorro y ambulancias que venían de Mosul para socorrer a las víctimas, para impedir su traslado.

Tel Afar ha sido escenario en los últimos siete días de varios atentados y ataques, el último de ellos cometido por un suicida con una bomba adosada al cuerpo que se inmoló en el interior de una pastelería, donde causó decenas de víctimas.