Al menos siete personas murieron hoy y otras nueve resultaron heridas en un atentado suicida contra una gasolinera en una zona del conflictivo noroeste de Pakistán, ha informado una fuente policial.

El suicida detonó la carga explosiva que portaba en su vehículo mientras repostaba en una estación de servicio en el distrito de Charsadda, perteneciente a la Provincia de la Frontera del Noroeste (NWFP), según la fuente. De acuerdo con esta versión, entre los fallecidos por la explosión hay tres niños y dos mujeres.

Las fuerzas de seguridad acordonaron la zona y los heridos fueron trasladados a hospitales cercanos. El presidente paquistaní, Asif Alí Zardari, condenó el ataque y ordenó que se abra una investigación policial, según la agencia estatal APP.

ATENTADOS FRECUENTES

Los atentados terroristas y otros episodios de violencia son habituales en la Frontera del Noroeste (NWFP) y en el adyacente cinturón tribal fronterizo con Afganistán, donde encuentran refugio numerosos grupos talibanes y miembros de la red terrorista Al Qaeda.

Hoy mismo, ocho insurgentes murieron y cuatro soldados resultaron heridos en enfrentamientos en el norteño valle de Swat, donde el Ejército paquistaní lanzó a finales de abril una operación a gran escala contra la insurgencia talibán, informó una fuente militar citada por France Presse. Los militares fueron heridos tras accionar un suicida la carga explosiva que portaba cuando fue rodeado por las fuerzas de seguridad.

ÉXODO DE LA POBLACIÓN CIVIL

Esta ofensiva en Swat, que también se desarrolla en otros distritos vecinos de la NWFP, se ha cobrado hasta la fecha la vida de unos 1.700 integristas y más de 200 soldados, según cálculos militares.

Los combates han causado un éxodo masivo de población civil, aunque el Gobierno inició a mediados de julio el proceso de retorno de las personas desplazadas y el Ejército dio por concluido el grueso de la operación.