BAGDAD. "¡Parece su hermano mayor!", exclamó el dueño de un café de la capital de Irak cuando, el pasado jueves, vio la imagen del exministro de Información iraquí, Mohamed Said al Sahaf (en la foto horizontal) en la televisión. Flaco y canoso, la ´máquina de las mentiras´ del desaparecido Sadam Husein, como se le conocía, no es la sombra de lo que era hace tan sólo tres meses (en la foto pequeña).