Ante la mirada impotente de la población civil libanesa, millares de extranjeros huyen del Líbano por tierra mar y aire en medio de un espectacular despliegue de vehículos. El Pentágono ordenó ayer al grupo expedicionario de asalto Iwo Jima zarpar hacia la costa del Líbano para ayudar a la evacuación de sus compatriotas, que son unos 25.000. El Iwo Jima está compuesto por tres embarcaciones anfibias y otros dos buques, todos de guerra, que deben ayudar a un crucero comercial contratado por el Departamento de Defensa. Ya han sido evacuados en helicópteros 120 ciudadanos de EEUU.

Mientras, los ciudadanos británicos esperaban ayer con la llegada del primer barco británico a aguas de Beirut. El premier , Tony Blair, espera haber completado antes del fin de semana la evacuación de 5.000 personas. La ONU, que tiene 600 empleados internacionales y 1.200 libaneses, ha evacuado a 445 personas "no esenciales".

Entre los miles de extranjeros que ayer se hallaban en curso de repatriación figuran 200 noruegos. Francia repatrió a 450 franceses entre las 750 personas que salieron en el ferry Iera Petra hacia Chipre el lunes. El mismo avión que los llevó a París debía volver anoche para recoger a 300 más que esperaban en Larnaca.

PROBLEMAS PARA RUSIA En otros vuelos se esperaba ayer la llegada a Bruselas de 88 franceses, 212 italianos, 29 belgas, 24 estadounidenses y 325 alemanes. Además, 300 rusos lograron igualmente llegar a Siria, pero según el Kremlin, "es imposible" evacuar a los rusos que se encuentran en el sur del Líbano, cerca de la frontera con Israel.