Miles de personas se manifestaron en las principales ciudades de Vietnam en contra de los planes del Gobierno de aprobar una restrictiva ley de ciberseguridad y crear zonas económicas especiales que favorecen el control de inversiones de China. Las principales protestas se produjeron en Hanoi, la capital, y en Ho Chi Minh (antigua Saigón), donde medio millar de personas salieron a la calle, una estampa poco habitual en Vietnam, donde las manifestaciones están prohibidas por el Partido Comunista.

Pese al fuerte despliegue policial, los manifestantes marcharon por algunas calles céntricas y se concentraron delante de los consulados de Estados Unidos y China en Ho Chi Minh, donde la protesta duró más de cinco horas.

Durante la marcha, los manifestantes corearon consignas y lucieron pancartas en contra de una ley, aún no aprobada, que permitiría que inversores extranjeros controlen tres nuevas zonas económicas especiales durante 99 años. "El Gobierno llega a acuerdos secretos con China, quiere regalarle la tierra y ese será el fin de Vietnam. Ahora la Asamblea Nacional dice que no van a aprobar la ley o que van a cambiarla, pero es solo para apaciguarnos. Tenemos que protestar para evitarlo", dijo a Efe, Dinh, un profesor jubilado de 65 años.

TENSIÓN Y ARRESTOS

Las protestas fueron pacíficas, pero se vivieron momentos de tensión cuando agentes de la Policía vestidos de paisano arrestaron a algunos de los activistas y el grupo trató de cortar el paso a los vehículos policiales. "En Hanoi la manifestación ha sido reprimida y la Policía también ha arrestado a algunos de los participantes", declaró Nguyen Chi Tuyen, uno de los activistas más prominentes. En los últimos años se han registrado varias protestas en contra de la creciente influencia de China en la región, en especial en el disputado Mar de China de Meridional, que la disidencia vietnamita a utilizado como medio para criticar al régimen comunista de Hanoi.

AMENAZA DE MAYOR CENSURA

Aunque la mayor parte de las consignas iban dirigidas a la supuesta connivencia del Gobierno vietnamita con Pekín, varias pancartas mostraron su rechazo a la nueva ley de ciberseguridad que la Asamblea Nacional prevé votar el martes. Si se aprueba, las autoridades vietnamitas podrán obligar a las empresas tecnológicas a entregarles datos personales de ciudadanos particulares y a censurar los contenidos de los usuarios. Amnistía Internacional (AI) denunció en un comunicado que esta norma permitirá al Gobierno "controlar el último espacio seguro de libertad de expresión en el país" y pidió a Apple, Facebook, Google, Microsoft y Samsung que presionen a las autoridades para frenar su aprobación.