El 24 de abril de 1915, miles de armenios fueron arrestados por supuesta hostilidad contra el Gobierno turco. Solo un mes después, se autorizaba su deportación por "razones de seguridad interna". En septiembre, se abolió el derecho de los armenios a vivir y trabajar en territorio turco y, desde entonces y hasta 1917, cientos de miles de armenios fueron deportados a los desiertos de Mesopotamia. En total, hubo 1,5 millones muertos y deportados, según datos de Armenia (entre 250.000 y 500.000 según Turquía).