COPENHAGUE. El ministro Bertel Haarder instó a los ayuntamientos a ser más severos con los inmigrantes y propuso que en lugar de darles ayudas sociales, se les asignen los trabajos "más sucios y peor pagados", como "despellejar visones y trabajar con los cerdos". En una entrevista al semanario Danske Kommuner , Haarder, que tacha a los refugiados de perezosos, afirma que a los inmigrantes sólo se les informa de sus derechos y no de sus obligaciones. EFE