El rey Mohammed VI ha enviado un discurso, con motivo de la I Cumbre entre la UE y Marruecos, en el que reclama un "arreglo político" que otorgue una "amplia autonomía" al Sáhara Occidental dentro del reino de Marruecos, y que solucione el "diferendo artificial" en torno a su integridad territorial.

En el discurso, leído al inicio de la reunión que se celebra en Granada por el primer ministro marroquí, Abas el Fasi, el Rey ha instado a todas las partes a atender el llamamiento del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y defiende la iniciativa marroquí de otorgar autonomía al Sáhara respetando la "integridad nacional y territorial" de Marruecos.

El monarca ha subrayado su compromiso con la construcción de un futuro común para el Magreb, "fundado sobre el respeto de la soberanía de los Estados, de su integridad territorial y de las reglas de la buena vecindad".

Mohamed VI apuesta también por forjar una relación más sólida y estrecha con la UE a partir del "Estatuto avanzado" otorgado por el bloque europeo al país magrebí y ha insistido en que el proyecto de "sociedad abierta, democrática y solidaria" que están construyendo "con fe y determinación".

Retrasos en el acuerdo agrícola

Ha hecho asimismo un llamamiento para ayudar a la población inmigrante y "encontrar un equilibrio identitario que añada a la propia identidad del migrante nuevas dimensiones, sin que por ello le haga perder sus propias raíces". Los inmigrantes deben ser, a su juicio, "un vehículo de encuentro cultural y humano".

El Rey ha abogado por superar "el simple establecimiento de una zona de libre cambio" y defiende la dinamización de los flujos de inversiones, las sinergias industriales y agrícolas y las políticas conjuntas en I+D+i, con especial hincapié en los proyectos medioambientales y de energías limpias.

En este contexto, el monarca ha pedido acelerar la ejecución del reciente acuerdo agrícola y ha lamentado los retrasos en su entrada en vigor. A su juicio es necesario un "verdadero partenariado estratégico" entre África y Europa con planteamientos "concertados y solidarios".

Por ello ha ofrecido la colaboración de Marruecos y ha mostrado su apoyo a la Unión por el Mediterráneo, iniciativa en la que deben impulsarse proyectos sociales, económicos y culturales. Mohamed VI ha considerado que el "Estatuto avanzado" concedido a su país debería tomar la forma de un "partenariado privilegiado" para que Marruecos avance hacia Europa.

Abiertos a Europa

Lo hará, ha dicho, gracias a su apuesta por una sociedad democrática, orgullosa de su identidad, "en armonía con su tiempo y abierta sobre su vecindad inmediata, sobre todo europea" y ha animado también al bloque europeo a avanzar hacia Marruecos, brindándole "apoyo tangible".

El objetivo debe ser, ha subrayado, que las nuevas generaciones vivan en un espacio de seguridad y prosperidad "haciendo frente a los sesgos de ostracismo, de la exclusión y del terrorismo y donde prevalezcan los ideales de respeto a la dignidad humana y a la inviolabilidad de las naciones".

El Rey ha considerado un "signo de buen augurio" que la primera cumbre se celebre en Granada, "uno de los testimonios vivos de la fecunda simbiosis histórica, cultura y humana" entre las riberas del Mediterráneo y expresión del mestizaje entre las culturas marroquí, española y europea.