La cooperante británica Linda Norgrove, secuestrada en Afganistán el pasado 26 de septiembre, murió anoche a manos de sus captores durante una operación militar para rescatarla, ha informado hoy el ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido, William Hague.
Norgrove, de 36 años, que trabajaba para el grupo humanitario estadounidense DAI, perdió la vida durante la operación para liberarla encabezada por fuerzas de Estados Unidos bajo bandera de la OTAN, según el Foreign Office. En la operación no participaron fuerzas británicas.
La mujer, nacida en la localidad escocesa de Sutherland, había sido secuestrada junto a tres afganos cuando los dos vehículos en los que viajaban en la provincia oriental afgana de Kunar fueron detenidos por hombres armados.
El primer ministro británico, David Cameron, afirmó hoy que fue "correcto" tratar de rescatar a la cooperante. "Me solidarizo con la familia de Linda, que estará muy afectada por esta trágica noticia. Ella estaba haciendo un trabajo valioso para la población afgana", dijo Cameron en una declaración. "Las decisiones sobre las operaciones para liberar rehenes son siempre difíciles. Pero cuando la vida de un británico está en tanto peligro, y si nosotros y nuestros aliados podemos actuar, creo que es correcto tratar" de hacerlo, agregó.
SIN PARTICIPACIÓN BRITÁNICA
"Rindo tributo al coraje y destreza de todos los que participaron en este esfuerzo, y me uno al ministro de Asuntos Exteriores en condenar la toma de rehenes", puntualizó. Antes, en una declaración, el jefe de la diplomacia británica dijo que ayer se tomó la decisión de enviar tropas para liberarla "teniendo en cuenta el peligro en el que se encontraba".
El general estadounidense David Petraeus, al mando de los 152.000 soldados aliados en Afganistán, ha asegurado que los participantes en la operación militar "hicieron todo lo posible" para salvar a la mujer.
