Kurt Waldheim, el controvertido presidente de Austria entre 1986 y 1992 y también secretario general de la ONU entre 1972 y 1981, murió hoy en Viena a la edad de 88 años de un paro cardíaco y circulatorio, informó su yerno Othmar Karas.

Waldheim falleció en su casa de Viena, a las 12.45 hora local (10.45 GMT) rodeado de su familia, tras haber salido del Hospital Clínico de Viena, donde había pasado unos días en cuidados intensivos por una "infección con fiebre". El ex jefe de Estado austríaco había sido el 28 de mayo pasado en el Hospital Central de Viena, aquejado de "una infección con fiebre".

El presidente de la República de Austria, Heinz Fischer, ordenó arriar las banderas a media asta en los edificios oficiales en señal de luto y expresó su "profunda condolencia" a su esposa Elisabeth Waldheim, informó la presidencia en un comunicado difundido en Viena.

El jefe de la fracción parlamentaria del Partido Popular Austríaco (ÖVP) y ex canciller federal austríaco Wolfgan Schüssel dijo que Austria ha perdido a "un gran luchador por la paz y la libertad en el mundo". Elogió también a Waldheim por su carrera política en búsqueda de la conciliación entre las partes de los conflictos internacionales, así como en los esfuerzos por fortalecer la diplomacia multilateral, ante todo en el seno de las Naciones Unidas.

El ex secretario general de Naciones Unidas fue el centro de una polémica internacional a mediados de la década de 1980, cuando, en medio de su campaña para la presidencia de Austria, salió a la luz su pasado vinculado al régimen nazi en la Segunda Guerra Mundial.

El Congreso Mundial Judío y el Partido Socialdemócrata de Austria (SPÖ) le acusaron de haber participado o al menos haber sabido de crímenes perpetrados por su unidad militar alemana contra judíos y gitanos en los Balcanes.

A pesar de esas acusaciones, Waldheim ganó las elecciones presidenciales con el 54 por ciento de los votos y lideró Austria entre 1986-1992, mandato que vivió en aislamiento diplomático internacional, al haber sido declarado "persona non grata" por parte de Estados Unidos.