Once personas han muerto hoy, entre ellas tres policías, y otras 23 resultaron heridas en un atentado suicida con un camión bomba contra una comisaría del barrio de Al Daura, en el sur de Bagdad, informaron fuentes de seguridad.
Al filo de las 11.00 hora local (08.00 GMT), el suicida intentó empotrar el vehículo en la comisaría, pero una valla de hormigón se lo impidió por lo que detonó la carga explosiva en la entrada del edificio.
El estallido destruyó una gran parte de la comisaría y provocó daños en las viviendas vecinas, afirmaron las fuentes, que revelaron que tras el atentado grupos armados atacaron las patrullas policiales que intentaron acercarse al lugar, por lo que pidieron apoyo aéreo estadounidense.
Las mismas fuentes habían indicado anteriormente que el ataque había dejado al menos cuatro agentes muertos y otros ocho heridos.
Los miembros y las dependencias de la Policía y el Ejército iraquíes son los blancos predilectos de los ataques y atentados de los grupos de la resistencia iraquí, por considerarlos colaboracionistas con la "ocupación" militar estadounidense.
La violencia persiste en Bagdad pese a las extremas medidas de seguridad impuestas dentro del nuevo plan de seguridad en vigencia desde el 14 de febrero pasado.
