Al menos nueve talibanes han muerto en varios sucesos ocurridos en el sur de Afganistán, y otros dos fueron capturados por las tropas occidentales en el sureste del país, informó hoy una fuente oficial.

Seis talibanes, entre ellos el dirigente local mulá Jamshid, murieron ayer en la provincia de Zabul (sureste) a consecuencia de los combates librados contra fuerzas del Ejército afgano, según un comunicado del Ministerio de Defensa.

En los enfrentamientos registrados en el pueblo de Musakhail, en el distrito de Navrak, no se produjeron bajas entre los soldados, indica la nota.

También ayer se produjo otro enfrentamiento en la región sureña de Kandahar, donde la Policía, que se enfrentó a unos 15 talibanes, mató a dos de ellos e hirió a otros cuatro, informó a Efe el responsable de la Policía fronteriza del sur del país, el general Abdul Raziq.

En el combates, que tuvo lugar en un área montañosa del distrito de Arghistán, resultó herido un policía, dijo el general.

Además, un insurgente murió ayer al estallar la mina que manipulaba para ponerla en una carretera del distrito de Ander, en la provincia de Paktika (sureste), informó el Ministerio de Defensa.

En esa misma región, las fuerzas afganas y occidentales capturaron hoy a dos insurgentes durante una operación, sin muertos ni heridos, en el distrito de Gomal, según otro comunicado, emitido por el Ejército estadounidense.

"El objetivo, miembro de una conocida red terrorista, era responsable de ataques contra las fuerzas occidentales y afganas en la región de Khost y las provincias vecinas", afirma el comunicado.

En Afganistán han muerto en lo que va de año medio millar de personas a causa de la violencia, que se suman a las cerca de 4.400 que perecieron el año pasado, el más violento desde la caída del régimen talibán en 2001.