La tregua de tres meses pactada por Hamas, la Yihad Islámica y las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa todavía no ha sido anunciada oficialmente y ya está siendo atacada por todos los flancos. Un israelí fue asesinado ayer por un adolescente palestino de 15 años y dos palestinos que llevaban cinturones de explosivos fueron abatidos por las fuerzas de seguridad israelís. Además, el Ejército prosiguió con sus operaciones en Cisjordania.

La tregua de tres meses está pactada y cerrada, y su anuncio oficial depende de cuestiones estratégicas. Yasir Arafat confirmó ayer el alto el fuego y dijo que el anuncio es inminente.

La fecha más probable que barajan responsables palestinos es el sábado, cuando la consejera de seguridad de EEUU, Condoleezza Rice, visite la zona. El anuncio podría efectuarse simultáneamente desde El Cairo y los territorios palestinos. Entregar a Rice la tregua y un acuerdo de retirada israelí del norte de la franja de Gaza y de Belén equivaldría a salvar la Hoja de ruta .

POSTURA DE HAMAS

Los representantes de Hamas en Gaza cambiaron ayer su discurso inicial de negar la existencia de una tregua. El portavoz del grupo islamista en Gaza, Abdelazziz Rantisi, dijo que la organización ha finalizado ya los debates respecto al alto el fuego y que divulgará formalmente su postura en los próximos días. Las versiones contradictorias sobre si Hamas había aceptado o no la tregua proceden de las diferentes corrientes existentes en la organización. Además, Hamas necesita que pasen unos días sin que Israel lleve a cabo asesinatos selectivos para, así, salvar la cara .

En referencia a esos ataques, a las operaciones militares israelís en los territorios y al parón en las negociaciones para la retirada de Gaza y Belén, el primer ministro palestino, Abu Mazen, emitió ayer un comunicado en el que acusó a Israel de poner trabas a la aplicación de la Hoja de ruta . La oficina de Abu Mazen también criticó la exigencia de Bush de que Hamas debe ser desmantelada, acusando al presidente de EEUU de haber realizado un "llamamiento a la guerra civil entre los palestinos".

En cambio, el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Silvam Shalom, se mostró "muy feliz" por las palabras del presidente estadounidense. Shalom afirmó que aplicar la Hoja de ruta no es conseguir una tregua, sino desarmar y destruir las infraestructuras de los grupos armados. Esta postura --apoyada por Washington-- resulta un mal augurio para la Hoja de ruta .

Mucho más si los líderes palestinos no pueden controlar a sus comandos, como quedó en evidencia ayer. Las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa reivindicaron el asesinato de un técnico telefónico israelí en la localidad árabe-israelí de Baka al Garbiyeh. Un adolescente palestino de 15 años disparó al trabajador israelí a quemarropa y se dio a la fuga, pero el joven fue herido por un agente de seguridad que protegía al técnico.

En la zona de Baka al Garbiyeh, dos palestinos que llevaban cinturones de explosivos fueron abatidos. También actuó el Ejército israelí, que detuvo en Naplusa y Tubas a 12 palestinos y destruyó en Hebrón la casa de un militante de Hamas.