El soldado británico que murió en Irak en 2003 por "fuego amigo" estadounidense lo fue por un acto ilegal resultado de un ataque criminal, señaló hoy un juez de instrucción. Al dar a conocer su dictamen sobre la investigación judicial de la muerte del soldado Matty Hull, el magistrado criticó además a las autoridades estadounidenses por no cooperar en la pesquisa.

Hull murió por las graves heridas sufridas en el carro de combate en el que viajaba el 28 de marzo de 2003 como parte de un convoy de vehículos acorazados que avanzaba por las cercanías de la ciudad de Basora, cuando fue atacado por un caza A-10 de EEUU.