Una nueva muerte por desnutrición infantil en Tucumán puso a esa provincia del norte argentino al borde de la intervención sanitaria del Gobierno y en el foco de una tormenta política por las acusaciones de desfalco del dinero que el Estado destina a asistencia social.
Tras conocerse la tragedia, la primera dama de Argentina, Hilda Chiche Duhalde, declaró que irá mañana a Tucumán a organizar una red social "le guste a quien le guste", en alusión a Julio Miranda, el gobernador y exdirigente sindical del peronismo, salpicado por las denuncias de apropiación indebida.
Chiche, que controla parte de la ayuda a los millones de indigentes, intentó así marcar distancias con unos hechos que erizan a los argentinos.
INDIGENCIA EXTREMA
Tucumán, que en los años 60 fue un polo cultural, en los 70, teatro de operaciones de la guerrilla rural y el primer laboratorio de la represión estatal a gran escala de los militares, es una provincia citrícola y azucarera. El 60% de su población está parada.
El ministro de Salud, Enrique Zamudio, aseguró ayer que se han detectado 46.000 casos de indigencia extrema. "La mayoría de los padres también fueron chicos desnutridos, pero sobrevivieron. Estamos atendiendo ahora a una tercera generación. Pero ahora la situación está agravada", añadió.
El relato de una de las madres de los niños muertos en Tucumán adquirió mayor dramatismo al conocerse ayer la autopsia: según el forense, había fallecido asfixiado por los parásitos.
Un trabajo del Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil, ONG consultora de la Organización Mundial de la Salud, revela que en el año 2001 la desnutrición afectaba entre el 11% y el 17% de la población argentina. Tras el desplome, se cree que la desnutrición alcanza el 20%.
EL DINERO SE EVAPORO
La relación entre la situación social y la crisis política de este país quedó al desnudo en Tucumán. En el 2002 la provincia recibió un suplemento del Estado de más de unos 500.000 euros bimensuales para las carencias alimentarias. Pero parte del dinero se evaporó.
Según el diario Página 12 , de Buenos Aires, de los cuatro funcionarios que manejaron esos fondos en los últimos dos años uno está procesado, otro denunciado por malversación y violación de los deberes de los funcionarios y un tercero tiene a un excolaborador procesado y a otro, en busca y captura.
