El Nobel de la Paz de este año ha distinguido al bangladesí Muhammad Yunus, de 66 años, y al Grameen Bank por su labor de ayuda a los pobres a través de los microcréditos.Con su elección, el Comité Noruego del Nobel ha lanzado un mensaje contra el neoliberalismo y la globalización desenfrenados. "La paz duradera no puede lograrse si no se consigue abrir un camino para que una amplia parte de la población salga de la pobreza", afirma el comité en el veredicto, que ha supuesto una sorpresa al no figurar los galardonados en las últimas quinielas de los expertos.Conceder créditos a personas sin recursos, una fórmula que hace algunas décadas parecía una misión imposible y sin sentido desde el punto de vista de cualquier banquero, se ha convertido, como ha explicado el comité, en "un instrumento importante en la lucha contra la pobreza".Formado en Estados UnidosYunus es el director ejecutivo del Grameen Bank. Nació en Bangladesh en 1940, es musulmán no practicante y estudió Ciencias Económicas en Nueva Delhi. Posteriormente amplió su formación en Estados Unidos con becas de las instituciones Fullbright y Eisenhower. El premiado volvió a su país en 1972 para dirigir el departamento de Economía de la Universidad de Chittagong.Tras darse cuenta del abismo entre las teorías que enseñaba y la realidad, Yunus inventó el microcrédito a finales de los años 70 con el préstamo de unos 30 euros a 43 mujeres que querían emplearse en actividades comerciales y artesanales.El proyecto del economista se transformó en 1983 en una entidad financiera independiente, el Grameen Bank, fórmula que pronto se exportó a numerosos países de su entorno. Después llegó a economías en vías de desarrollo de otras áreas geográficas, como Iberoamérica, y, por último, a países avanzados del primer mundo.Ayuda a las mujeresEl comité del premio ha destacado el hecho de que la mayoría de los receptores de los microcréditos sean mujeres, lo que ha convertido estos préstamos en "una importante fuerza de liberación en sociedades en las que las mujeres tienen que luchar contra un entorno social y económico represivo"."Cada individuo en la Tierra tiene el potencial y el derecho de vivir decentemente. Yunus y el Grameen Bank han demostrado que hasta los más pobres de entre los pobres pueden trabajar para salir adelante", afirma el comité.Hasta la concesión del Nobel, el economista bangladesí ha visto reconocidos sus esfuerzos con numerosos galardones, entre ellos, en España, el Príncipe de Asturias a la Concordia (1998) y el primer Premio Internacional Navarra da la Solidaridad (2002).