Nueve muertos --dos soldados estadounidenses y siete iraquís-- es el balance de otra jornada de violencia en Irak. Según fuentes militares, entre los iraquís fallecidos figuran dos niños que perecieron en un ataque contra un convoy en el centro de Bagdad.

La acción de la resistencia se produjo en la calle de Karrada, una de las arterias comerciales de la ciudad, y consistió en la detonación de una bomba al paso de una patrulla. Un soldado murió también en el ataque, en el que resultaron heridos otros cinco militares, ocho policías y un traductor. El otro militar murió en Faluya, también por la colocación de un explosivo a pie de carretera. Tres soldados más resultaron heridos.

La resistencia se cebó en los colaboradores de EEUU. En Bagdad, dos guardas de seguridad iraquís murieron en un ataque contra un convoy de obreros.