La recesión que vive Estados Unidos "podría durar años" si no se adoptan medidas como el plan de recuperación que propone, valorado en unos 775.000 millones de dólares, afirmó hoy el presidente electo del país, Barack Obama. En un discurso en la Universidad George Mason en Fairfax (Virginia), Obama afirmó que si no se adoptan "medidas drásticas", el índice de desempleo podría superar el 10 por ciento y la economía podría registrar una pérdida de ingresos en torno al billón de dólares.

El plan de recuperación económica que propone "debe comenzar hoy mismo", sostuvo el presidente electo, que asumirá el poder el próximo 20 de enero. El equipo de Obama valora este plan, que debe ser aprobado por el Congreso, entre los 675.000 y los 775.000 millones de dólares (492.800 y 565.800 millones de euros), pero el presidente electo insistió en que "no se trata de un programa de obras públicas".

"Es un plan que reconoce la paradoja y la promesa de este momento, que hay millones de estadounidenses que quieren encontrar trabajo al tiempo que hay mucho trabajo por hacer", declaró el futuro mandatario, que prometió inversiones en áreas como la energía o la educación. Entre otras cosas, prometió "doblar la producción de energía alternativa en los próximos tres años", modernizar más del 75 por ciento de los edificios federales y mejorar la eficiencia energética de dos millones de hogares de EEUU.

También se comprometió a invertir para que en un plazo de cinco años todos los historiales médicos de los estadounidenses estén informatizados, así como a equipar decenas de millares de centros educativos. "Haremos más para equipar a EEUU para la economía global", indicó, para anunciar la reforma de la red eléctrica o inversiones en ciencia y tecnología.

El plan también dedicará una parte a reducir impuestos a las familias trabajadoras o de clase media, que podrían recibir reembolsos de hasta mil dólares en el próximo ejercicio fiscal. Según indicó el presidente electo, "no cabe duda de que el coste de este plan será considerable" y "desde luego aumentará el déficit presupuestario a corto plazo", pero las consecuencias de no hacer nada serían aún peores, dijo.

Aunque a largo plazo no cabe depender del Gobierno para la creación de empleo o para el crecimiento económico, "sólo el Gobierno puede aportar el impulso necesario a corto plazo para sacarnos de una recesión así de profunda y de grave", sostuvo.

"Sólo el Gobierno puede romper los círculos viciosos que están devastando nuestra economía, donde una falta de gasto lleva a la pérdida de empleos, que a su vez lleva a una reducción aún mayor del gasto; donde la incapacidad de prestar y recibir crédito detiene el crecimiento y conduce a una reducción aún mayor del crédito", destacó.

Tras reconocer que el Gobierno actual ya ha gastado ingentes cantidades de dinero sin que ello haya generado resultados, Obama afirmó que su plan "invertirá en lo que funciona" y no desperdiciará los fondos. "Debemos mantener un debate abierto y honesto sobre este plan en los días venideros, pero insto al Congreso a moverse lo más rápido posible en beneficio de los estadounidenses", agregó.

"Si somos capaces de ayudarnos los unos a los otros, y de escucharnos, y de cumplir cada uno nuestra parte en favor de la nación y la posteridad, no me cabe duda de que en el futuro veremos a 2009 como uno de los años que marcaron un nuevo comienzo esperanzador para EEUU".