Una organización no gubernamental china de derechos humanos denunció ayer que las autoridades de Pekín mantienen bajo arresto domiciliario a varios disidentes para evitar que puedan manifestar su oposición al régimen durante la visita de Clinton a China, que finaliza hoy. Según la oenegé a estos disidentes, una decena, se les ha prohibido circular por la ciudad a menos que sea a bordo de vehículos policiales.

Gran parte de los disidentes afectados por la detención domiciliaria firmaron la llamada "Carta 08", un manifiesto hecho público el pasado mes de diciembre en el que se exige al régimen chino reformas políticas democráticas y el respeto a los derechos humanos.