La gran ofensiva lanzada el viernes contra la ciudad de Samarra ha dejado un saldo de 125 insurgentes muertos y 88 detenidos, según declaró ayer a la CNN el general estadounidense John Batiste. El militar aseguró que la operación continuará en los próximos días. A las afueras de Samarra, la Media Luna Roja levantó un pequeño campamento, formado por una veintena de tiendas de campaña, que dan cobijo a miles de vecinos que han huido de la ciudad.

En Faluya, mientras, aviones norteamericanos reanudaron sus ataques aéreos, matando a 7 personas y dejando heridas a otras 13. Fuentes médicas aseguraron que entre las víctimas hay mujeres y niños. En el extrarradio de la ciudad, un coche bomba estalló ayer al paso de un convoy de EEUU. Un soldado y un civil fueron heridos. En Mosul, la explosión de otro coche bomba causó heridas a tres soldados estadounidenses. Ayer se supo también que el jueves, siete cristianos murieron en Bagdad, en una emboscada, informa Kim Amor.

Además, decenas de miles de personas se manifestaron ayer en ciudades del Kurdistán a favor de un referendo sobre la independencia de la región y para pedir que la ciudad petrolera de Kirkuk, fuera de los límites de la región, sea su capital.