Una ola de violencia desatada esta madrugada en Río de Janeiro ha causado la muerte de al menos 18 personas. Siete de ellas han resultado carbonizadas en la quema de un autobús y los otros nueve fallecidos han sido tiroteados. Además, ocho agentes y 14 civiles han resultado heridos en diversos incidentes.El secretario de Seguridad Pública del estado de Río de Janeiro, Roberto Precioso, ha indicado que esta noche se han registrado 12 ataques distintos por parte de bandas armadas. Precioso ha atribuido los incidentes a distintas facciones criminales que operan en las favelas de la ciudad y que actuaron coordinadamente en reacción a recientes operaciones policiales en esas zonas. Tres detenidosTres hombres han sido arrestados por su supuesta participación en la quema de un autobús de pasajeros en la autopista Washington Luiz, que une las ciudades de Río y Sao Paulo, y en el que han muerto carbonizados siete de los ocupantes. Según los datos de Roberto Precioso, la docena de ataques han causado la muerte de 16 personas: nueve civiles, dos policías y cinco supuestos delincuentes. "Gracias a la acción preventiva y represiva de la policía hemos conseguido evitar lo peor, aunque evidentemente el resultado es trágico", ha explicado Precioso a la emisora CBN. No se llegará a la violencia de Sao Paulo, según las autoridadesEl secretario de Seguridad ha descartado que la reciente ola de ataques pueda llegar a los niveles de la que sacudió a la ciudad de Sao Paulo, la más grande de Brasil, el pasado mayo, cuando una semana de violencia causó al menos 200 muertos, entre policías, agentes penitenciarios, civiles, reclusos y supuestos criminales. Precioso ha calificado como "una imbecilidad" las versiones que apuntan que las bandas armadas han respondido a supuestas operaciones de grupos paramilitares, integrados por policías, para controlar a esas bandas que se dedican, principalmente, al tráfico de drogas.