La ONU ha investigado en los tres últimos años a 319 soldados y empleados en sus 16 misiones de paz y ha despedido o relevado a la mitad de ellos por acusaciones de abuso y explotación sexual. La cifra fue facilitada el viernes por la subsecretaria general para Misiones de Paz de Naciones Unidas, Jane Holl Lute, que aunque se felicitó porque en los últimos años la lucha contra los abusos ha avanzado, reconoció que la organización aún no está satisfecha.

"Siempre habrá gente que se comporte mal", dijo Holl Lute, que recordó que en las misiones participan 200.000 personas de más de 100 países, y detalló que muchos de los casos están relacionados con la prostitución.

Una investigación realizada por el diario británico The Daily Telegraph sobre supuestos abusos cometidos contra 20 niños por personal de la ONU en Sudán replanteó la gravedad del problema.