El equipo de la ONU que se encargará de evaluar la viabilidad de celebrar en Irak elecciones a corto plazo llegó ayer a Bagdad en medio de la discreción más absoluta y las medidas de seguridad más estrictas.

La delegación conversará con los responsables de la Autoridad Provisional de la Coalición que dirige el administrador civil estadounidense, Paul Bremer, y con los principales líderes del país.

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, aceptó crear esta misión para resolver la incertidumbre sobre el traspaso de poder a los iraquís, previsto para el próximo junio.