La policía italiana efectúa una operación para detener a 40 presuntos miembros de los dos clanes de la Ndrangheta, mafia calabresa, originarios del pueblo de San Luca (sur de Italia) y que están enfrentados desde hace años, informaron fuentes policiales.

La operación, que se está llevando a cabo en Calabria y en otras regiones italianas, es una respuesta al séxtuple asesinato el pasado 15 de agosto de Duisburgo (oeste de Alemania), que se cree fue debido a un nuevo ajuste de cuentas entre estas dos "familias", señalan los medios.

Los buscados están acusados de asociación mafiosa, tráfico de drogas y posesión de armas pero, según las últimas informaciones, entre los primeros detenidos no se encuentran los presuntos autores de los asesinatos de Alemania. Dos de los arrestados son Achille Marmo, hermano de Marco, uno de los fallecidos en Duisburgo, y Giovanni Strangio, hermano de Sebastiano, también muerto en el mismo ataque. Se ha emitido una orden de arresto contra Giovanni Nirta, considerado el jefe de la "familia", que sería responsable de la venganza de Duisburgo, según los investigadores.

El pueblo de San Luca, con 4.500 habitantes, es el escenario de una "guerra" mafiosa, que comenzó en 1991 con un banal lanzamiento de huevos, que derivó en una pelea callejera y terminó con dos muertos. Desde ese día, los ajustes de cuentas entre las dos "familias" se han repetido durante los años. La última víctima había sido Maria Strangio, mujer de Giovanni Nirta, lo que habría desencadenado la venganza de Duisburgo.

Justo hoy, una delegación alemana, encabezada por el jefe de la Oficina Federal de Criminalidad (Bundeskriminalamt), Jorg Zierke, viajó a Calabria para intercambiar información sobre los asesinatos con los investigadores italianos que han seguido el caso.