El Partido Socialdemócrata (PS) de Andorra decidió ayer dar por zanjada la polémica que ha enfrentado al primer grupo de la oposición en el Consell General con el palacio episcopal de La Seu d´Urgell a propósito del acto de juramento del nuevo copríncipe, Joan Enric Vives.

La polémica tuvo su epicentro en el acto de juramento de la Constitución del nuevo copríncipe y, como trasfondo la obligación de mantener la paridad entre los dos miembros de la jefatura del Estado andorrano, el presidente francés y el obispo de la Seu. El PS consideró que realizar el acto en el Parlamento ponía en peligro la paridad.