Tras una semana de arduas negociaciones, la OTAN alcanzó anoche un acuerdo sobre el alcance de la misión de formación de las fuerzas armadas iraquís, según anunciaron fuentes oficiales. El acuerdo incluye el apoyo de la Alianza Atlántica a un centro de formación militar en Irak y el entrenamiento de personal militar iraquí por parte de los países aliados fuera de Irak, según fuentes diplomáticas.

Francia, Alemania, España y Bélgica se mostraron satisfechos con los cambios introducidos en la propuesta inicial para limitar la misión de la OTAN a labores de formación y excluir su implicación en acciones de combate. España, Francia y Alemania ya han anunciado que no enviarán ningún militar a Irak y que sólo participarán en labores de formación fuera del país.

La misión se desarrollará bajo una estrecha y continua supervisión del Consejo Atlántico. El comité militar de la OTAN elaborará en las próximas semanas el plan operativo de la misión, en el que se detallará el número de oficiales necesarios, la duración de la misma, las fuerzas de protección requeridas y el sistema de financiación. Ese plan operativo aún deberá ser aprobado por los 26 países aliados.

Por otra parte, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, apeló ayer a los estados miembros a que garanticen la protección del personal civil de las Naciones Unidas, "incluso aportando tropas". El Consejo de Seguridad, en una resolución del pasado junio, pidió a los estados que contribuyeran a la puesta en marcha de una fuerza multinacional para la protección de una misión de la ONU en Irak. Pero Annan no ha logrado ningún compromiso en este sentido.