El Papa Francisco ha lavado los pies a 12 reclusos -4 italianos, 2 filipinos, 2 marroquíes, 1 moldavo, 1 colombiano, 1 nigeriano y uno de Sierra Leona-, que cumplen condena en la prisión central de Roma Regina Coeli, en un ritual propio de su pontificado y que emula a Jesús de Nazaret en la "Última Cena". En la prisión, el Pontífice, de 81 años, ha celebrado la Santa Misa 'in Cena Domini' del Jueves Santo en una ceremonia que para los católicos abre el Triduo Pascual cuando se conmemoran la pasión, muerte y resurrección de Jesús.

Las personas a las que Francisco a lavado los pies pertenecen a distintas confesiones. Hay dos musulmanes, un budista, un ortodoxo y 8 católicos. Ante cada uno de ellos el Pontífice se ha arrodillado y, con una jofaina y una palangana de plata, ha lavado y besado sus pies. Durante su visita al centro penitenciario, el Pontífice ha tenido un encuentro también con los reclusos enfermos y ha acudido también un encuentro con algunos de los internos del Módulo VIII, reservado para detenidos por delitos de índole sexual.

En la cárcel el Papa ha hecho una defensa de la reinserción de los presos y se ha mostrado en contra la pena de muerte. "Cada pena debe estar abierta al horizonte de la esperanza. Por esto no es humana ni cristiana la pena de muerte. Cada pena debe ser abierta a la esperanza, a la reinserción", ha señaló. "No hay ninguna pena justa sin que se abra a la esperanza. Una pena que no conlleve esperanza no es cristiana, ¡no es humana!", ha añadido.

PASAJE BÍBLICO

Durante la misa profundizó ante los presos en el pasaje bíblico que narra cuando Jesús lavó los pies a sus discípulos, "una labor de esclavo" con el que Cristo, ha apuntado, "quiere darnos un ejemplo de cómo debemos servirnos los unos a los otros". Ha afirmado que "Jesús dio la vuelta a un hábito histórico y cultural de aquella época" y dictó con su gesto que "un buen jefe, sea donde sea, debe servir".

"Yo pienso muchas veces (...) que si muchos reyes, emperadores, jefes de Estado hubieran comprendido la enseñanza de Jesús y, en vez de mandar, de ser crueles, de asesinar a la gente, hubieran hecho esto, ¡cuántas guerras se habrían evitado!", ha exclamado. El Papa ha recomendado el "servicio" aunque haya "gente que no facilita esta actitud, soberbia, odiosa, gente que quizá desea el mal", pero ha puntualizado que "estamos llamados a servirles aún más".

PROCESIÓN EN LA BASÍLICA DE SAN PEDRO

Esta mañana, el Papa ha presidido la Misa Crismal a las 9:30 de la mañana en la Basílica de San Pedro, ante sacerdotes, cardenales y obispos de toda Italia. Mañana viernes Santo, Francisco estará presente en la celebración de la Pasión del Señor prevista a las 17:00 horas en la Basílica Vaticana, mientras que por la noche acudirá al Coliseo de Roma para presidir el vía crucis, las catorce estaciones que recorren desde la condena a muerte de Jesús hasta su sepultura que tendrá lugar a partir de las 21.15.

El sábado santo, el Papa entrará en procesión a la basílica de San Pedro a oscuras portando el cirio Pascual para celebrar la Vigilia Pascual cuando bautizará a 8 adultos.

Finalmente, el 1 de marzo, Domingo de Resurrección, Francisco presidirá la misa en la Plaza de San Pedro a las 10:15 h, tras la cual dará al mundo entero la bendición "Urbi et Orbi" al mediodía que solo se imparte sólo en Semana Santa, Navidad y tras la elección de un Pontífice.