RABAT. Alí Lmrabet, condenado a cuatro años de cárcel por ultraje al rey de Marruecos, decidió el jueves iniciar una huelga de hambre salvaje para protestar "por la tortura psicológica" a la que le someten las autoridades penitenciarias. Lmrabet, que desde el 6 de mayo está en huelga de hambre, anunció que no iba a beber más líquidos y ordenó que le quitasen el suero. A. B.