El dictador chileno Augusto Pinochet sufrió ayer un nuevo accidente cerebrovascular y fue internado de urgencia en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Militar de Santiago, pero los médicos subrayaron que su estado no revestía gravedad y sería dado de alta tras ser sometido a una revisión.

"Gracias a Dios no es nada crítico. Fue una pérdida de conciencia", señaló su hijo mayor, Augusto Pinochet Hiriart. El dictador tiene 89 años y numerosos problemas de salud, pero sus ingresos hospitalarios levantan suspicacias. Su nueva llegada al Hospital Militar tuvo lugar un día después de que la Corte de Apelaciones de Santiago comenzara a analizar el desafuero en la causa que se le sigue por cuentas secretas millonarias. En diciembre, Pinochet fue internado en el mismo hospital justo cuando la Corte de Apelaciones iba a estudiar un recurso para evitar que lo procesaran por la desaparición de 9 personas.