La policía francesa ha registrado esta mañana el domicilio de la heredera de L'Oréal, Liliane Bettencourt, por orden de la jueza Isabelle Prévost-Desprez, según ha informado el diario Le Monde.

El registro se realizado dentro de la investigación sobre si el artista François-Marie Banier se aprovechó de Liliane Bettencourt por su edad avanzada.

La heredera de la multinacional cosmética L'Oreal y una de las mayores fortunas de Francia no se encontraba en su casa cuando la policía penetró en ella.

El registro tenía como objetivo averiguar si Banier o sus familiares se habían apropiado de obras de arte colocadas en el domicilio de Bettencourt.

PEDAZOS DE PAPEL

Un magistrado ha declarado que se buscaba unos "pedazos de papel" mediante los que Banier se comunicaba con el gestor de la fortuna de su amiga millonaria, Patrice de Maistre, según una empleada de Bettencourt, Dominique Gaspard, que de 1991 a 2008 se ocupó de las habitaciones personales de la heredera.

Gaspard fue interrogada el pasado 23 de julio por la jueza Prévost-Desprez, días antes de que la propia Liliane Bettancourt, el 26 de julio, recibiese la visita de los agentes de la brigada financiera de la policía para tomarle declaración.

Ayer, la empleada fue interrogada de nuevo por la policía e indicó donde había escondido esos trozos de papel escritos entre De Maistre y Banier y que se creían destruidos, ha señalado Le Monde.

TEXTOS APRENDIDOS DE MEMORIA

Recordó que gracias también a Gaspard, se descubrió a finales de julio la existencia de textos más amplios redactados para que Bettencourt los aprendiera de memoria antes de ciertas citas importantes.

Por ejemplo 15 días antes de una cita con el jefe de Estado francés, Nicolás Sarkozy, en 2008, para obtener el bloqueo de la denuncia interpuesta por su hija, Françoise Bettencourt-Meyers, contra Banier, hasta hace poco heredero universal de su madre.

En declaraciones a la emisora France Info, el abogado de la octogenaria, Georges Kiejman, ha dicho estar "extremadamente sorprendido" y "escandalizado por los métodos de la magistrada" que ha ordenado el registro del domicilio de su clienta, quien, ha precisado, se encuentra en el extranjero.

Asimismo, Kiejman, ha cuestionado la "imparcialidad" de la jueza y ha explicado que el Tribunal de Nanterre debe pronunciarse el próximo 14 de septiembre sobre una apelación sobre la nueva recogida de información y ha denunciado, por ello, las prisas "introducidas" por la jueza antes de que hay un dictaminen.