No le falta razón al PP cuando acusa a CiU de desorientación por sumarse a última hora a la manifestación del sábado contra la guerra en Irak. Sobre todo porque no hace ni un año que descalificaron a los manifestantes de Barcelona durante la cumbre de la UE. Pero cuantos más seamos los que clamemos contra esta guerra injusta, mejor. Aunque cueste comprender la extraña pirueta de CiU: Pujol estará en Barcelona, pero ya ha anunciado que no le apetece ir a la mani; Mas sí querría manifestarse, pero no estará. Y Trias y Duran irán, a pesar de su proverbial sintonía con el PP.Mientras, el mejor aliado de CiU en Cataluña,

Alberto Fernández Díaz, confunde la legitimidad democrática de quien gana en las urnas con la obstinación casi patológica de José María Aznar por hacer la guerra solo, contra la opinión del resto de los partidos y de una apabullante mayoría de ciudadanos. ¡Como si los votos fuesen un cheque en blanco para arrasar a un país o para debilitar la Unión Europea!