El cólera ya ha llegado a Puerto Príncipe. Tras el brote de hace tres semanas en el noroeste de Haití, los esfuerzos para evitar que la epidemia llegara a la capital haitiana han sido en vano. La enfermedad, que se propaga con rapidez y puede provocar la muerte en menos de tres días si no se trata, ha desatado el pánico desde hace cinco días en la capital. El máximo riesgo es que se propague por los campamentos de sin techo que cobijan a 1,5 millones de personas tras el terremoto.

El balance total de muertos por cólera es de 800 personas mientras los pacientes hospitalizados desde octubre superan ya los 10.000. La ONU, avalada por las principales oenegés sanitarias que operan en el país, alertó ayer de la extrema gravedad de la situación. La oficina para asuntos humanitarios de la ONU apuntó ayer que más de 200.000 haitianos podrían contraer la enfermedad.