Los ataques de la resistencia iraquí contra las tropas de EEUU que ocupan Irak dieron ayer un salto cualitativo. Un misil tierra-aire estuvo a punto de impactar en un avión de transporte Hércules C-130 norteamericano cuando el aparato aterrizaba a primera hora de la mañana en el aeropuerto de Bagdad, uno de los lugares mejor vigilados de la capital iraquí. Fue el prólogo de otra jornada repleta de dificultades para los ocupantes en la que prosiguió el goteo de bajas norteamericanas.

El Pentágono ha transformado el aeropuerto internacional de Bagdad en una verdadera fortaleza, rodeada de un perímetro de seguridad que no permite acercarse a menos de un kilómetro de distancia de la terminal a los iraquís sin salvoconducto. Todo ello, sin embargo, no fue suficiente para impedir el ataque de ayer, el primero de esta naturaleza tras la caída del régimen de Sadam.

"No tengo constancia de que se haya producido un ataque similar anteriormente", admitió ante la agencia France Presse el sargento Amy Abbot, portavoz del centro de prensa militar en Bagdad. El ataque sucedió a primera hora de la mañana, justo cuando el Hércules se disponía a tomar tierra en el aeropuerto de Bagdad. Fue tan sólo un avance de los tres incidentes armados confirmados oficialmente por los portavoces militares de EEUU, precisamente en la víspera del 35 aniversario de la llegada del partido de Sadam Husein al poder.

ATAQUE CON LANZAGRANADAS Un soldado perdió la vida en un ataque con lanzagranadas en las cercanías de la prisión de Abu Ghraib, al oeste de la capital. Según la versión oficial, varios insurgentes lanzaron una granada contra un camión militar en la carretera que une la capital con el aeropuerto al paso de un convoy de aprovisionamiento de unos 20 vehículos. Con esta muerte, son ya 33 los soldados fallecidos en Irak en acciones de combate desde el momento en que el presidente de EEUU, George Bush, anunciara el fin oficial de la guerra.

En un segundo ataque, un niño iraquí falleció en el barrio de Al Mansur cuando varios desconocidos lanzaron una granada contra un vehículo militar de EEUU que vigilaba la entrada de un banco. Un soldado resultó herido. En el otro extremo de la ciudad, la deflagración de un artefacto explosivo hizo saltar por los aires un vehículo blindado. Tres soldados resultaron heridos.

TENET, ANTE EL CONGRESO

El jefe de la CIA, George Tenet, debía comparecer ayer a puerta cerrada ante una comisión del Congreso para testificar sobre las informaciones difundidas por Bush sobre la falsa compra de uranio en Africa por el régimen de Sadam. Tenet debe esclarecer el papel que ha desempeñado.