Un nuevo ataque contra las tropas norteamericanas en Irak causó ayer la muerte a un soldado y heridas a otros cuatro, mientras los expertos de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) iniciaron las labores de inspección del centro de investigación nuclear de Tuwaita, muy cerca de Bagdad, que fue saqueado tras la caída de Sadam Husein.

El ataque se produjo en las proximidades de Tikrit, feudo del depuesto régimen de Sadam. Los heridos tuvieron que ser trasladados en helicóptero a un centro médico de la zona. El incidente se produce después de que el Pentágono admitiera su preocupación ante el goteo de soldados muertos en las últimas semanas, lo que hace pensar a Washington que se está gestando una resistencia armada contra la ocupación.

Los siete expertos de la AIEA deberán verificar en los próximos días si materiales radiactivos fueron robados durante los saqueos tras el final de la guerra. La alianza militar anglo-norteamericana recibió fuertes críticas por no haber impedido el pillaje en Tuwaita. No obstante, un portavoz de EEUU quiso minimizar los riesgos de contaminación.

Por otra parte, el célebre tesoro de Nimrod, compuesto de centenares de joyas que datan de la milenaria civilización asiria y que se daba por perdido, fue hallado en los sótanos del Banco Central.