Rusia puso ayer un punto final a su segunda guerra por recuperar el control sobre Chechenia, iniciada en 1999. Tal y como lo había prometido el Kremlin, el Comité Nacional Antiterrorista (CNA) levantó el estricto régimen especial de seguridad que imperaba en esa república caucásica desde hacía casi 10 años, pese a que los combates de envergadura acabaron ya en el 2002.

Esa decisión significa que Moscú cede todos los hilos del poder al presidente prorruso de Chechenia, Ramzán Kadyrov. La anunciada retirada de 20.000 soldados del Ministerio del Interior ruso, desplegados en Chechenia provisionalmente, deja el control real de la república en manos de las fuerzas de Kadyrov, acusadas por los defensores de los derechos humanos de secuestros, torturas y asesinatos.

"Esta decisión está llamada a crear condiciones para la ulterior normalización de la situación en la república de Chechenia", declaró el CNA en un comunicado. Según el documento, se levantarán algunas restricciones que obstruyen la vida cotidiana de los chechenos.

De momento, Rusia dejará en territorio checheno una brigada de las tropas de Interior y una división motorizada del Ministerio de Defensa. Sin embargo, esas dos fuerzas desplegadas de forma permanente no tendrán derecho a intervenir en los "asuntos internos" chechenos.

PRIMERA DERROTA El "régimen de operación antiterrorista" había sido impuesto en otoño de 1999, después de que varios grupos de la guerrilla separatista chechena entraran en el territorio de la vecina república rusa de Daguestán. Como respuesta, el Kremlin no solo les desalojó del territorio, sino que también envió 30.000 soldados para recuperar el control sobre Chechenia que había perdido en 1996, con su derrota en la primera guerra chechena, iniciada en 1994.

De una guerrilla bien preparada y armada que contaba en 1999 con unos 20.000 combatientes no quedan más que unas decenas de hombres armados que se esconden en zonas montañosas de Chechenia.

LOS REFUGIADOS El presidente checheno señaló que el levantamiento del régimen de la operación antiterrorista "ayudará al retorno a casa" de aquellos chechenos que abandonaron su país por los conflictos armados. Según organizaciones de defensa de los derechos humanos, más de 200.000 personas huyeron de Chechenia, tanto durante la primera guerra separatista (1994-1996) como durante la "operación antiterrorista". Otras 100.000 personas, es decir el 10% de la población, murieron.