Rusia reanudará hoy a las 8 de la mañana el suministro de gas a la Unión Europea (UE) "si no se produce ningún obstáculo", anunció ayer en Bruselas el vicepresidente del grupo estatal ruso Gazprom, Aleksandr Medvedev. No obstante, el gas ruso aún necesitará uno o dos días para llegar a los países europeos tras atravesar el territorio de Ucrania.

Rusia interrumpió el suministro a la UE y los países balcánicos el 7 de enero, después de acusar a Kiev de apropiarse del gas destinado a los países europeos. La situación en la Europa Oriental y los Balcanes es de extrema gravedad, con problemas de calefacción, industrias paralizadas y temperaturas muy frías.

El Gobierno ucraniano volvió a firmar ayer de nuevo el protocolo sobre la supervisión internacional del gasoducto sin ningún añadido en esta ocasión, después de que la anotación manuscrita de la víspera con referencias a una declaración anexa enfureciera a Moscú y bloqueara la prevista reanudación del suministro de gas a la UE. La declaración ucraniana rechazaba que Kiev tuviera deudas pendientes con Gazprom.

Rusia y la UE suscribieron también al mediodía el nuevo texto, que autoriza a los técnicos de la UE, de Gazprom y de la ucraniana Naftogaz a supervisar las estaciones de bombeo para verificar que el gas ruso es enviado hacia la UE y que no se producen sustracciones a lo largo de gasoducto ucraniano.

El compromiso de supervisión internacional no resuelve, sin embargo, el contencioso bilateral sobre el corte del suministro de gas ruso a Ucrania vigente desde el 1 enero por el impago de sus deudas. Como Ucrania acumuló reservas de gas a lo largo del año pasado, Kiev no muestra tener ninguna prisa por llegar a un acuerdo con Moscú.

Los ministros de Energía de los Veintisiete urgieron a Moscú y a Kiev a encontrar una solución permanente a sus diferencias que evite la repetición de la interrupción del suministro.