Se llama Los sabores de la legalidad . La tienda, que vende productos naturales cultivados en las tierras confiscadas a las mafias, acaba de abrir sus puertas frente a la Columna de Trajano, en los Foros Imperiales de Roma. Aceite virgen extra, vino, mermeladas, pastas, verduras confitadas-. Un cartel advierte: "Las personas que entran en este lugar y compran nuestros productos, reforzarán la cultura y la legalidad en el país". Firmado: la Diputación de Roma. "Me llevo unas guindillas y unas berenjenas", apunta Carmen, una mujer que se deja fotografiar mientras aporta su colaboración en la lucha contra la mafia.

Los sabores de la legalidad es el primer comercio surgido de la rebelión civil contra el crimen organizado. Es, según sus organizadores, la prueba fehaciente de que si no se incautan las propiedades de las mafias, la lucha contra el crimen organizado en Italia se queda en pura palabrería. En los años 80, cuando Cosa Nostra de Sicilia mató a los principales dirigentes políticos de la isla, el Parlamento de Roma aprobó leyes cuyas medidas coercitivas incluían el secuestro de los bienes mafiosos.

Pero, ¿qué puede hacer el Estado con unos corrales de ganado o una sociedad de la construcción? Al principio, se nombraron comisarios para que administraran las propiedades. Pero ¿y después, al cabo de años? Al principio, se decidió sacarlos a subasta, con la idea de que terrenos e inmuebles, quizás comprados con el dinero de las drogas, la prostitución forzada o las contratas arregladas , regresarían a la sociedad civil.

Sin embargo, los tentáculos del crimen organizado lograban siempre amedrentar a los posibles postores hasta que quedaba uno solo, su representante, que se volvía a adjudicar el bien incautado a un precio ridículo. El paso siguiente fue secuestrar los bienes, incautarlos y después, entregar su gestión a asociaciones de la sociedad civil.

En los mismos años, un cura carismático y un tanto loco, llamado don Luigi Ciotti, desató una cruzada. Fundó una asociación llamada Libera , y desde entonces, vive con una escolta permanente de policías. El portal de Libera es el banco de datos más completo sobre las mafias italianas. Todos los productos de la botica de Roma llevan la marca Libera , y la frase De las tierras liberadas de la mafia.

"¿Has visto? Sabor de la legalidad", comenta una pareja. "Será una exposición", aventuran ambos, mirando hacia atrás. Un joven con apariencia de cooperante espera que el cronista termine su trabajo y después, discretamente, llena una bolsa de botes y latas de productos.

Desde Piamonte hasta Sicilia, la magistratura ha confiscado, además de tiendas, inmuebles y otras actividades comerciales e industriales, 500 hectáreas de terrenos. El Estado las entregó a 10 cooperativas sociales, a través de oposiciones públicas. Trabajan en ellas 100 jóvenes, que cultivan las tierras o han abierto centros sociales e incluso turismos rurales. "Nuestros productos se venden en algunas cooperativas nacionales y en la red de los comercios solidarios", explica Miro Barbaro, responsable de márketing de Los sabores de la legalidad .

Según sus datos, después de casi cinco años de experimento y antes de abrir la tienda de Roma, alguna de las cooperativas ya factura un millón de euros anuales con la marca Libera . Unos 300.000 euros otras, y las más pequeñas o recientes, unos 100.000 euros.

"Toda la producción es biológica, y se aplica la rotación de los cultivos, lo que permite un intercambio de materias primas entre las cooperativas", ilustra Barbaro. Ello significa que una cooperativa tiene que reemplazar un año las legumbres que produce por trigo, que después vende a la cooperativa que elabora pastas, y esta, a su vez, le pasa las legumbres a cambio del trigo que no puede producir.

Mañana, el camión cooperativo traerá las cestas de Navidad de los productos de Libera . La más modesta cuesta 15 euros, la segunda, 25 y la tercera, 40: llevan berenjenas, garbanzos, aceite, vino, miel, conserva de tomate, legumbres o harina y la inscripción La Navidad de Libera bajo la legalidad . "Los productos siempre se agotan, ha sido un éxito inesperado", dice la dependienta. Un folleto de propaganda se abre con la pregunta: "¿De qué parte estás tú?".