Sadam Husein ha pedido al presidente del tribunal, el juez kurdo Rauf Abdelrahman, ser ejecutado a tiros y no ahorcado si es condenado a muerte. El expresidente iraquí ha comparecido ante el Tribunal Penal Supremo, en Bagdad, por primera vez desde que iniciara una huelga de hambre tras el asesinato de uno de sus abogados.Según fuentes judiciales, el dictador ha asegurado al entrar en la sala de la corte que le habían obligado a asistir a la nueva sesión del juicio.Sadam y siete de sus excolaboradores son juzgados en relación con la ejecución de 148 chiís iraquís después de haber sido objeto de un juicio sumarísimo por un supuesto intento de asesinato del exdirigente en 1982.