La tradicional universidad de verano de los socialistas franceses en el puerto de La Rochelle (oeste de Francia) comenzó ayer en un ambiente de rivalidad exacerbada entre los candidatos a la investidura para la elección presidencial del próximo año. Todos los postulantes hicieron acto de presencia y todos van contra la favorita de los sondeos, Ségol¨ne Royal, que en tanto que presidenta de la región Poitou-Charentes tuvo el privilegio de inaugurar los debates.

A contrapelo de sus rivales, Royal centró su discurso en los logros conseguidos con su política regional y no hizo ninguna referencia a su proyecto para las elecciones presidenciales.

Acogida por una gran ovación en los asistentes y con el micrófono en la mano paseándose por el escenario, Royal reafirmó su intención de mantenerse al margen de los debates y no quiso someterse al juego de las clásicas preguntas y respuestas de los militantes. Esto fue inmediatamente criticado por sus rivales que, comenzando por Laurent Fabius, aprovecharon la ocasión para presentar las grandes líneas de su programa presidencial ante más de 3.000 personas.

"ELLA O YO" Por si fuera poco, su compañero y primer secretario del partido, Fran§ois Hollande, declaró ayer que, contrariamente a lo que se creía, él no ha renunciado todavía a postularse para el puesto. "En cualquier caso, será ella o yo", afirmó.

Para hoy, está previsto el retorno oficial del exprimer ministro Lionel Jospin que, aunque se ha declarado "disponible" para una eventual candidatura presidencial, todavía no la ha confirmado. Sus partidarios decían ayer que podría desbancar a Royal en el último momento.