La victoria de Hillary Clinton en Pensilvania se traduce, en términos de delegados, en 14 representantes de ventaja para la senadora, según la contabilidad de Realclearpolitics.com. Así las cosas, Barack Obama sigue en cabeza con una cómoda ventaja (1.482 frente a 1.330 delegados electos).

En términos de voto popular, los 200.000 votos de diferencia que logró la senadora en Pensilvania han reducido considerablemente la ventaja que le llevaba su adversario.