La situación en el Líbano es cada día "más desesperada y más peligrosa". Así lo afirma Shaheen Chughtai, cooperante de Intermón Oxfam. Los bombardeos y las acciones militares han creado una situación de peligrosidad extrema que imposibilita el reparto de la ayuda humanitaria, sobre todo en el sur.
--¿Cuántos desplazados hay?
--Es difícil precisar la cifra. Son más de 900.000 sobre un total de cuatro millones de habitantes. Según la Comisión de Socorro del Gobierno libanés, el 7 de agosto había 915.672 desplazados, pero los números cambian constantemente. Solo en Beirut hay entre 120.000 y 150.000. Y la situación en Tiro es desesperada. La gente está atrapada. Como en una ratonera. Se han quedado los más desvalidos: enfermos, ancianos, niños y familias que carecen de medios para conseguir un vehículo.
--¿Por qué hay civiles que se quedan desafiando a Israel?
--Los israelís bombardean constantemente y la gente no puede escapar. Ahora es tan peligroso huir como quedarse. Los habitantes del sur han buscado refugio en sótanos. Los que lograron escapar hacia el norte están en escuelas, centros públicos e incluso en campos de refugiados palestinos, uno de los cuales, Ain Helu, fue bombardeado ayer mismo.
--¿Por qué no llega la ayuda?
--Israel ha advertido que atacará a cualquier vehículo que transite entre la frontera y el río Litani. Las organizaciones humanitarias no pueden llegar para prestar ayuda. Tratan de encontrar un camino seguro pactado con los israelís, pero luego esos acuerdos no se respetan. Además, es difícil saber dónde se oculta la gente de la zona, porque se ven obligados a moverse a causa de los combates. Y necesitan desesperadamente ayuda: agua, alimentos, medicinas, herramientas... La ayuda no llegará a su destino sin un alto el fuego que permita a las organizaciones humanitarias cumplir con su misión.
