Las expectativas se cumplieron en Irak. Las elecciones legislativas celebradas ayer dibujan un país dividido. El voto fue masivo en las zonas de mayoría shií y kurda, pero no así en las ciudades y pueblos con fuerte presencia suní, donde apenas se votó.

Los grupos armados, por su lado, cumplieron con la promesa de atacar los colegios electorales y mataron a 36 personas. Además, dejaron heridas a más de cien. Aun así, las autoridades estimaron que el 60% de los 13 millones de los electores inscritos acudieron a las urnas. El desarrollo de la jornada causó gran satisfacción en la Casa Blanca.

La apertura de las urnas en Bagdad fue la señal para que los suicidas que operan bajo las órdenes del jordano Abú Musab al Zarqaui, líder de Al Qaeda en Irak, empezaran a inmolarse en los centros de votación. La jornada electoral empezó temprano, a las siete de la mañana hora local, cuando abrieron gran parte de los colegios electorales.

JORNADA "HISTORICA" El presidente interino, Gazi al Yauar, y el primer ministro, Iyad Alaui, fueron de los primeros en acercarse a sus colegios electorales, ubicados en la superprotegida Zona Verde, en el centro de Bagdad. Ambos dirigentes aprovecharon la ocasión para calificar la jornada de "histórica". El ministro de Interior, Falah al Naqib, declaró a la televisión británica Channel Four que las fuerzas de EEUU podrían retirarse de Irak dentro de 18 meses.

Los shiís acudieron masivamente a las urnas. La mayoría lo hicieron acatando el llamamiento realizado insistentemente por sus líderes religiosos, en especial el gran ayatolá Alí al Sistani. En las provincias donde son más numerosos, situadas en el sur del país, la afluencia de electores fue constante. Pero también votaron mayoritariamente los que viven en las zonas del centro del país, que comparten con los sunís. Según datos oficiales, hasta un 90% de electores shiís depositaron ayer su voto.

De confirmarse este dato, los seguidores de Sistani, unidos en la Alianza Iraquí Unida, lograrán tener un alto número de representantes en la futura Asamblea Nacional, que deberá redactar la Constitución y nombrar al primer ministro.

Lo mismo ocurrió en las tres provincias kurdas del norte del país, donde se formaron largas colas de votantes a las puertas de algunos colegios electorales. Los kurdos, además de elegir como el resto de sus compatriotas a los 275 miembros de la Asamblea Nacional y a los consejos gubernamentales, votaron también por sus futuros representantes en el Parlamento autónomo.

El líder del partido Unión Patriótica del Kurdistán (UPK), Jalal Talabani, dijo que las elecciones celebradas ayer suponen para su pueblo "la primera verdadera experiencia democrática". El índice de participación en las tres provincias kurdas --Sulaimaniya, Irbil y Dohuk--, se estimó en torno al 80%.

ESCRUTINIO Ayer ya empezó el lento y laborioso escrutinio de votos, que en algunas zonas de Bagdad se realizó a la luz de las velas, debido a los cortes de electricidad. Deberá pasar una semana para que se conozcan los primeros datos oficiales. Los resultados definitivos se darán a conocer dentro de unos 10 días.