El presidente de Liberia, Charles Taylor, anunció ayer que dejará el poder y saldrá del país el próximo 11 de agosto para exiliarse en Nigeria, lo que pone fin a varias semanas de incertidumbre tras el cerco de la capital liberiana por los rebeldes. El dirigente liberiano tomó la decisión después de reunirse en su residencia presidencial de Monrovia con una delegación de alto nivel de la Comunidad Económica de Estados del Africa del Oeste (Cedeao), presidida por el secretario general de la organización, Mohamed ibn Chambas.

Taylor declaró a los periodistas que abandonará el poder y otra persona ocupará su cargo. "Lo más importante es que todo lo que hemos dicho respecto a dimitir y dejar el país, va a suceder", agregó.