Chuquisaca elegía ayer a su nuevo prefecto (gobernador) en una contienda que profundiza la división entre el presidente Evo Morales y la oposición autonomista. El ajedrez político de Bolivia indica que el ganador dominará mejor el tablero con vistas a la tantas veces anunciada "batalla final" entre "indigenistas" y "neoliberales", y que mantiene a ese país en vilo permanente.

Sucre, la capital, amaneció ayer con los ecos de un atentado que suspendió durante más de una hora las retransmisiones de radio y televisión. La policía detuvo más tarde a dos universitarios con dinamita en sus mochilas. El mal presagio se desvaneció y unos 210.000 chuquisaqueños votaron en calma. Savina Cuéllar, una exaliada de Morales, y el sociólogo Wada, candidato del Movimiento al Socialismo (MAS, en el poder), saben que está en juego algo más que unos comicios regionales.

OTROS CUATRO REFERENDOS Las elecciones en Chuquisaca han sido precedidas por cuatro referendos autonómicos en Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija en los que el ganó con el 80% de las adhesiones. Pero, desde La Paz, el Gobierno se siente dueño de los votos por el no y las abstenciones, que representan más de 40% del padrón electoral.

La situación de "empate catastrófico" entre los seguidores de Morales y el oriente boliviano comenzaría a inclinar la balanza hacia uno de los lados a partir de lo que ocurra en una Chuquisaca inestable. Sucre, su capital, albergó una Asamblea Constituyente que votó una Carta Magna sin concurso opositor y en medio de disturbios. Sucre también reclama volver a ser la capital de Bolivia, una reivindicación que ha venido acompañada de la mano de un peligroso enconamiento racial.

Más allá de lo que ocurra en Chuquisaca, Morales concentra sus energías en el referendo revocatorio de todas las autoridades ejecutivas bolivianas, previsto para el 10 de agosto. El MAS cree que el mandatario saldrá airoso de ese desafío, que puede poner en un brete a alguno de los prefectos opositores.

REFERENDO REVOCATORIO "Si tienen dignidad vayan a las elecciones y defiendan con el voto sus ideas, pero no sean cobardes. Si dicen que han ganado con el 80% en una consulta hecha entre cuatro paredes, gallos y media noche, que pongan ese porcentaje en el revocatorio y vayan con esa cifra a enfrentar al presidente Morales", dijo el vicepresidente Alvaro García Linera.