Los parlamentarios conservadores que han facturado gastos abusivos deberán devolver el dinero recibido. Así lo ordenó ayer el líder de los tories , David Cameron, amenazando con expulsar a quienes no cumplan la orden. El anuncio de las medidas disciplinarias se produjo horas después de que el Daily Telegraph publicara los extravagantes gastos de los grandes patriarcas del Partido Conservador británico. En la lista de lo pagado con dinero público, hay facturas por el mantenimiento de aristocráticas mansiones en el campo, como la limpieza de la piscina, la de un foso, la compra de abono, el cambio de una cerca, la instalación de un pórtico o el salario del servicio. Uno de los mencionados por el diario, Sir Michael Spicer, reclamó el dinero por la poda de los setos que rodean el helipuerto de su finca y la factura por instalar una lámpara.

La revelación enfureció a Cameron, que lucha por romper con la imagen tradicional de los tories como el partido de las familias rancias y privilegiadas. Tras pedir perdón, Cameron comenzó a meter en cintura a los suyos. En el futuro, los diputados tories solo podrán reclamar gastos básicos por sus segundas viviendas, como el alquiler renta o los recibos de la luz y el gas, pero no por los muebles.

"Comprendemos el enojo del público", afirmó Cameron. "No me importa que los gastos se atuvieran a las normas. No eran correctos y quiero pedir perdón", añadió. Los laboristas parecen obligados a adoptar ahora medidas similares. Diputados, del Gobierno y la oposición, mencionados en las listas filtradas en los últimos cinco días, han anunciado abochornados, que devolverán el dinero.